No diré que una empresa va a desaparecer si no cuenta con placas solares en su cubierta, en ningún caso, sólo quiero ampliar el horizonte con el cual se evalúa hoy el impacto de una instalación para autoconsumo de energía eléctrica en una empresa.
El desarrollo de energías renovables, reportará nuevos beneficios a quienes estén preparados y cuenten con sistemas de generación para autoconsumo dentro de pocos años… ¿Cuántos?… Me animo a decir 5 años, con temor a fijar el horizonte demasiado lejano.
La transición del modelo energético actual, tal como lo conocemos, a un modelo distributivo y asociativo tendrá un impacto directo en el consumidor y más aún si éste es también productor de energía. Se eliminarán costes administrativos y en algunos casos de distribución, los costes de producción disminuirán, los sistemas de producción serán cada vez más eficientes… por nombrar algunos factores a los que me refiero.
¿Cómo impactará a los consumidores este cambio en el modelo energético?
En términos prácticos los propietarios de la energía serán todos quienes cuenten con sistemas de generación y la energía no tendrá un solo dueño o unos pocos, como ha sido hasta ahora. Las condiciones asociativas que pueden desarrollarse junto a los nuevos modelos de negocio otorgarán la posibilidad de compartir y suministrar energía a costos muy inferiores a los que conocemos hoy, esto significa que tendremos la posibilidad de ahorrar más a la vez que percibiremos un mayor beneficio por nuestra energía suministrada al sistema.
Los impactos negativos al medio ambiente debido al uso y producción de la energía se reducirán cada vez más y la imagen de las empresas que apuestan por energías limpias se verá cada vez más beneficiada.
Estos cambios afectarán a todos quienes sean consumidores de energía, es decir a todo el mundo, y deben ser tomados en cuenta hoy por quienes evalúan la decisión sobre el desarrollo de un proyecto solar fotovoltaico, o de otro tipo, que le permita autoconsumir su propia energía. Pues el tiempo será un factor clave.
El desarrollo tecnológico y sus efectos en el mercado suceden de forma rápida; provocados por cambios en los hábitos de consumo y cambios en la consciencia social, laboral y medio ambiental de los nuevos consumidores. Esto ha impactado a la industria, en ocasiones provocando verdaderos tsunamis comerciales.

Tsunamis Comerciales
Mencionaré algunos ejemplos icónicos que ayudarán a clarificar el impacto debido al desarrollo de nuevas tecnologías y modelos de negocio y cómo estos afectan en la industria.
- Fotografía digital: Efecto Kodac. La irrupción de la fotografía digital significó la desaparición de la multinacional Kodac.
- Hotelería: Efecto Booking, Expedia y Arb&B. El uso de plataformas para alquilar habitaciones y pisos a remecido a la industria hotelera.
- Industria Cinematográfica: Salas Multicines; Netflix, Amazon Prime. Que ha significado la desaparición de Blockbuster y pequeñas salas de cine en el centro de las ciudades, por ejemplo.
- Automotriz: Vehículos eléctricos de todo tipo. Irrupción de coches autónomos.
- Telefonía: Desarrollo de dispositivos móviles. Acceso rápido y fácil a la comunicación e información de los consumidores, sumado al uso de RRSS, han tenido un impacto directo en el comportamiento de las empresas.
- Restauración: Crecimiento del público vegetariano, vegano y que consume productos ecológicos. Hoy día la oferta gastronómica debe considerar factores que hace pocos años no existían.
- Ventas on-line: Todo tipo de artículos, aparición de grandes plataformas, Amazon por ejemplo.
- Industria discográfica: la aparición de plataformas como Spotify prácticamente ha borrado a las empresas discográficas del mapa.
- Industria televisiva: No está muy lejos de desaparecer debido al impacto de plataformas como YouTube.
A pesar de que parecen eventos ocurridos hace mucho tiempo, no hablamos de tantos años. Para entender la dimensión del nivel de desastre que puede llegar a ocurrir, basta decir que la acción de Kodak en el año 2004 cotizaba a 30 USD y que en 2012 se desplomó hasta los 27 centavos.
¿Sigues pensado que una instalación de autoconsumo te afectará solamente en tu factura eléctrica?
No quiero decir que una empresa vaya a desaparecer sin no cuenta con placas solares en su cubierta, en ningún caso, sólo quiero ampliar el horizonte con el cual evalúa hoy el impacto de una instalación para autoconsumo de energía eléctrica en una empresa.
Si hablamos del cambio de consciencia medio ambiental podemos decir que conceptos tales como huella de carbono y kilómetro cero, forman parte de nuestro lenguaje habitual y son factores que los consumidores consideran cada vez con más frecuencia a la hora de decidirse por uno u otro producto.
¿Podría darse el caso que los consumidores decidan en el futuro por empresas que utilizan 100% de energías renovables? Yo creo que sí. Todas las señales apuntan a ello.
¿Podría darse el caso de que empresas se vean muy afectadas si se quedan fuera del nuevo mercado energético?Pues me animo a decir que sí; la revolución energética será algo similar a la revolución del internet y su impacto económico puede ser demoledor.
¿Podría ocurrir que el futuro cercano una empresa pierda competitividad rápidamente ante el nuevo escenario energético? Pues podría ocurrir. El impacto del costo de la energía en el proceso productivo podría favorecer a las empresas que disfruten hoy de su propia energía; esto puede convertirse en una ventaja significativa dentro de poco tiempo.
Invertir en energías renovables representa algo mucho mayor que la posibilidad de obtener un ahorro en la factura a fin de mes.

Disrupción Limpia
El profesor Tony Seba en su libro Disrupción Limpia predice los efectos de las energías limpias en el actual mercado energético, automotriz y en el transporte público. El libro fue escrito en 2014, eso da tiempo a comprobar algunas hipótesis que plantea el profesor para afirmar que en 2030 el cambio del escenario energético y en el transporte será grande y la realidad muy diferente a la que disfrutamos hoy. Una de esas hipótesis es que la aparición de coches eléctricos tendrá un punto de inflexión en 2020, lo cual a todas luces se comprueba dando un vistazo por la oferta que disponemos hoy para hacernos de un coche eléctrico, de hecho, ya se puede encontrar coches eléctricos de segunda mano y cada vez es más fácil acceder a un punto de carga eléctrico. Sin ir más lejos, si hoy dispusiera de un coche eléctrico, podría venir a mi trabajo y cargarlo durante mi jornada laboral a un coste muy bajo. Eso me significaría un ahorro de un 90% en combustible, además de la comodidad de no tener que ir a repostar y ahorros en mantenimiento del coche.
Piensa en lo que significará producir tu propia energía y que ésta te sirva para cargar tu coche, tu patinete, tu dron, tu móvil, tu ordenador y hacer todo lo que necesitas con completa autonomía… Dejar repostar en la gasolinera y dejar de pagar por tu factura eléctrica para siempre. Esto cada vez está más cerca.
La ausencia de fondos ya no es excusa.
La rentabilidad de los proyectos fotovoltaicos para autoconsumo está comprobada. Es positiva en la mayoría de los casos que se analizan y esta rentabilidad no se ve afectada a la hora de acceder a financiación para desarrollar un proyecto. Los beneficios tributarios y fiscales favorecen aún más la instalación de energías renovables y la incertidumbre que había hace pocos años respecto del tema se despeja cada vez más.
En resumen, el escenario para invertir en energías renovables es favorable y lo será cada vez más.
El impacto que producirán las energías renovables en el mercado energético afectará los modelos de negocio y estos a su vez a las empresas y consumidores. Todo esto ocurrirá en poco tiempo.
Es bueno contar con la mayor cantidad de información a la hora de tomar cualquier decisión, más aún si estas significan una inversión importante. No pierdas la oportunidad de saber si una instalación fotovoltaica es beneficiosa para tu economía, personal o empresa. Estamos para ayudarte a resolver cualquier duda, puedes escribirnos sin compromiso.
Referencias: